ARREGLANDO LA CRISIS

En la columna "trabajar cansa ",que diariamente escribe en PÚBLICO el escritor Isaac Rosa ,haciendo el símil de ese contertulio caradura que todos conocemos y que en la barra del bar se escaquea siempre a la hora de pagar, está incrustada la frase: "Los causantes de la crisis – que cada uno los llame como quiera: sector financiero, mercados, especuladores, lobos o capitalismo a secas – han hecho un simpa tan descarado como consentido, y a los demás, que corremos poco y tenemos más vergüenza que ellos, nos toca pagar la cuenta"

Es cierto siempre ha sido así. Las "cagadas" de los poderosos siempre las pagamos los mismos, los trabajadores autónomos o contratados, los pequeños comerciantes, los funcionarios, pensionistas etc. Y en esta crisis como en otras anteriores, el salir de ella significa que los de arriba saldrán ganando, es decir reforzados y los de abajo perdiendo, o sea debilitados. Tanto es así que estoy pensando que las crisis no son tales "cagadas" por el contrario son producto de acciones ladinamente programadas para conseguir ese fin: el reforzamiento de unos y el debilitamiento de otros

Mi amigo Rafael en su última "COSA SUYA" se lamenta escribiendo:

ZAPATERO

Muchas de las acciones y leyes del gobierno Zapatero no me han gustado pues soy un amante de la libertad y eso de “cuidarnos como si fuera nuestra madre” me sobraba, pero en una cosa si le admiraba, durante esta crisis se ha mantenido firme en contra lo que ha pasado en las anteriores y hubiera hecho Rajoy, no ha querido que los pobres y la clase media pagasen los platos rotos por las alegrías de los poderes económicos que nadie controla y con una desvergüenza inaudita sin rebajarse nada de esos sueldos, bonos, compensaciones y jubilaciones millonarias (Que por supuesto no se merecen, pero como se creen dioses se auto incentivan) y tienen la desfachatez de cargar el peso económico del latrocinio de algunos e ineptitud de otros (Que por cierto todos siguen en sus cargos) a las clases medias. Pero tampoco ha tenido el valor de oponerse a ellos

Ahora ha sucumbido, quizás no ha tenido más remedio. Más yo le pediría sinceridad y que nos aclarara; ¿Que presiones ha tenido? ¿Quién y cómo ha presionado? ¿Por qué no se puede hacer nada contra los poderes económicos? ¿Por qué ahora que estábamos empezando a salir?

Cuando una persona renuncia de sus convicciones debe dimitir o exponer claramente los motivos pues somos mayores de edad y entendemos el poco poder de los gobiernos. Rafael Martínez Monserrat

Rafa: ¡Cómo me duele tu lamento! pues en tiempos pasados con la reconversión siderometalúrgica o con la crisis de 1993 al PSOE en el poder también cargó el mochuelo sobre las sufridas espaldas de los más débiles. Entonces el compañero Gómez (los antiguos de FEMSA saben de quien hablo) ante un lamento mio similar al tuyo actual, no se si para consolarme, me dijo: "No te extrañes, al capital en tiempos de crisis le viene muy bien que la social-democracia esté en el poder, pues les puede sacar las castañas del fuego más fácilmente de como lo haría un gobierno conservador que sería mucho más contestado por la clase obrera".