Hace unos días conocí a Dudú Boga (ignoro si he escrito bien el nombre, lo cogí de oídas), un ciudadano natural de Gambia y emigrante en España con algunos problemas de "papeleo" Iba tirando de un carrito en el que llevaba unas piezas de chatarra recogidas quien sabe donde.
En el cuarto de calderas de la calefacción de mi comunidad de vecinos, de la que tengo el "raro honor" de ser presidente, ya estorbaban los restos del viejo cuadro eléctrico que había sido sustituido recientemente y del que la empresa que nos hace el mantenimiento se había desentendido. Se lo ofrecí a Dudú quien con muestras de sumo agradecimiento lo cargó en el carro.
Tuve ocasión de charlar un rato con él, supe que llevaba algunos años en España, que vino legalmente, que en Gambia dejó a su familia (mujer y tres hijos) y que dormía en un albergue al que estaba obligado a abandonar el día 29 de noviembre, pues en este centro la estancia está limitada en el tiempo. ¡Ya me apañaré, no es la primera vez que me veo durmiendo en la calle!, me dijo.
Nos despedimos con un apretón de manos, le deseé suerte, quizás hipócritamente pues creo que no existe la suerte para Dudú.
5 comentarios:
Es un caso de los muchos que por desgracia suceden cada día en nuestras ciudades....Hay que hacer algo ya!!!
Jotaele: Te limitas aqí a narrar una situación ya por todos conocida de las tantas y tantas qe se dan en Madrid y en otras muchas ciudades de España y de otros países qe se han dado en llamar “del primer mundo”. Esperaba qe, a la vez qe plasmabas este hecho, no por conocido menos lamentable, aportaras algún comentario sobre el origen y los posibles culpables, qe seguro los hay, de estas injustas situaciones, y las posibles soluciones para erradicar este problema mundial. Soy bastante escéptico en cuanto a qe se vaya a encontrar una pronta solución global, y no es porqe no lo desee sino porqe solo vislumbro soluciones paliativas, muy válidas y encomiables, pero obviamente insuficientes. La solución definitiva solo la veo ubicada en la isla de Utopía. Una pena, sí, aunqe no renuncio a la esperanza de una solución ideal.
Afirmas qe no existe la suerte para Dudú. No es cierto, sí existe, pero la mala, la mala suerte.
Sisifo. Has dado en el clavo. En principio me propuse desarrollar más el tema, pero no he podido. La emigración para sus protagonistas es una tragedia, máxime si la víctima es de un color tan negro como el de Dudú, esto lo sabemos, lo que no sabes es la impresión que te da el trato cara a cara con el personaje que está en un momento límite. Al intentar escribir más sobre el tema, no he podido, lo he dejado así para que cada cual cuando tropiece con un Dudú medite que dentro de sí alberga una situación trágica
Jotaele: Afirmas qe no sé la impresión qe da el trato cara a cara... Recuerda los sitios en donde viví e imagínate las situaciones vividas y los Dudúes con qienes me tropecé, y en situaciones peores qe tu Dúdú.
Perdona, me he expresado mal, al decir no sabes me refería a mi mismo.
Un abrazo
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