FRAGA HA MUERTO

La noticia con la que me he desayunado esta mañana ha sido la muerte de Fraga. Al encender el aparato de radio estaban comentándola en una minitertulia y como es habitual en estos casos, en las opiniones vertidas sobre el finado se intentaba buscar los aspectos positivos de su larga carrera que en resumen se limitan a reseñar su evolución al pasar de ser el hombre servidor de la nefasta y brutal dictadura a ser el conductor hacia el sistema democrático de la derecha más conservadora del país. 

Antes de ponerme a redactar estas líneas me he ido derecho al blog Xornal Aberto, para conocer las opiniones de quien  ha vivido, o soportado en primera fila, al personaje durante los años que presidió la Xunta, y como era de esperar me he encontrado  con A MORTE DE FRAGA  en donde se manifiesta su deseo de no perder objetividad y no caer en el vicio de olvidar los "puntos oscuros". Y por la objetividad conseguida recomiendo su lectura.

Yo no considero que el cambio de chaqueta con su transformación de servidor del dictador a demócrata convencido sea motivado por una evolución de su pensamiento político, más bien fue debido a un acto muy premeditado para permanecer en las más altas esferas del poder al constatar que la dictadura era un régimen agotado.

Mi amigo gallego, responsable de Xornal Aberto, ha basado sus comentarios en la época más reciente, es natural, yo que soy bastante más viejo que él, haré los míos basándome en la época anterior, copiando la entrada que hice sobre el personaje en abril del 2008:   

Como una repetición de la actuación del rey frente a Hugo Chaves, Fraga ante una pregunta de la prensa, (me niego a emplear la coletilla "de los medios"), referente al enfrentamiento entre Rajoy y Esperanza Aguirre, refiriéndose a ésta dijo: Debe callarse ya, e imitando la brevedad del rey, siguió diciendo: he dicho todo lo que tenía que decir.
Mandar callar es sintomático de los autoritarios, y este caso es evidente para demostrarlo basta recordar algunos de los momentos vividos por el personaje así como alguna de sus manifestaciones:

Sirvió fielmente a la dictadura de Franco, tanto es así que fue ministro de Información y Turismo entre 1962 y 1969. Aunque se ha querido lavar la imagen de Fraga aludiendo a:
· Su Ley de Prensa (eliminó la censura previa pero mantuvo la censura posterior)
· Creó la red de paradores Nacionales
· Durante su mandato se acuñó la frase “España es diferente”, hay quien decía que la frase se refería a que el régimen español era una dictadura rodeada de sistemas democráticos, pero no cuela, ya que hasta la Revolución Portuguesa de los Claveles en 1974, a Franco le acompañaba como dictador el portugués Marcelo Caetano (sucesor de Salazar)
Pero nada puede lavar:
· Como ministro portavoz informó de la ejecución de prisioneros políticos. Por ejemplo en el caso del dirigente comunista Julián Grimau, ejecutado en 1963. La condena de Grimau provocó una gran campaña de rechazo en el exterior, que no logró salvarle la vida. Fraga justificó la ejecución y a fecha de hoy aún no ha expresado su arrepentimiento.
· El baño en las playas de Palomares junto con el embajador de Estados Unidos, acto realizado al servicio de los yanquis para quitar hierro al hecho gravísimo del escape de una bomba nuclear en el mencionado litoral almeriense.
· En 1966 se convocó un referéndum para aprobar la Ley Orgánica del Estado. El primer recuento arrojó un resultado a favor del 103%. El responsable de los recuentos era Fraga. Se tuvo que apañar un segundo resultado aproximado del 95%. ¡Vaya con el demócrata de toda la vida!.
En el bienio predemocrático 1975-1976 fue Vicepresidente del gobierno y Ministro de la Gobernación, ministerio que en democracia se llama de Interior y por supuesto se impuso la misión de mantener el orden y la seguridad en la calle en tiempos tan convulsos.
· Bajo su mandato en el Ministerio en 1976, acuñó la frase «La calle es mía», tras el intento de la oposición de manifestarse el uno de mayo, al cual se negó. 
· Más tarde permitió una manifestación estática en la calle Preciados, a la que asistí con compañeros de FEMSA, y que si estaba programada para media hora no permitió que pasase de diez minutos, disolviéndola, nos dirigimos hacia Gran Vía para coger el Metro, en las ventanas de telefónica estaban asomados unos obreros que estaban encerrados allí por conflicto laboral, intercambiamos saludos y frases de apoyo, llegaron los antidisturbios y escapamos de ellos bajando al Metro, los que lo vimos claro entramos por taquilla, corriendo sin pararnos a pagar por supuesto. Otros lo intentaron por los tornos automáticos y se atascaron, allí recibieron una buena ración de porrazos. Abajo en el andén pudimos ver las heridas de alguno de los manifestantes
· Los Sucesos de Vitoria (1976), donde la Policía Armada mató a 5 obreros e hirió a más de 100 personas. Como operación de concordia, a los dos días, Fraga fue al hospital a visitar a los heridos. Cuentan que uno de ellos al verlo entrar le preguntó ¿vienes a rematarme? Dicen que soberbiamente dio por terminada la visita
· Por esas mismas fechas se produjo la "Operación Reconquista" o sucesos de Montejurra, con dos muertos y varios heridos.
Durante el asalto al congreso, por parte de Tejero y sus doscientos guardias civiles, recuerdo que se llevaron de la sala a algunos de los dirigentes, Carrillo, Suarez…, con Fraga no se metían y esto le mosqueó, pensaría que le dejaban en evidencia, y protestó ¿A mi por qué no me llevan? Dos días después se celebró una gran manifestación con la asistencia de todo el mundo. Confieso que sentí vergüenza ajena viendo, en primera fila, hermanados a Carrillo, Fraga, Marcelino Camacho…
Se le tiene estima como uno de los padres de la Constitución. Yo no sé si esto benefició a la Ley de Leyes. Creo que lo más probable es todo lo contrario.
Hace poco, comentando sobre la reciente Ley de la Memoria Histórica, se refirió al régimen de Franco, como un periodo de paz y prosperidad.
Pero lo mejor, bueno lo peor y es lo que me ha inducido a escribir esto es lo que viene a continuación: En relación a su imposición de silencio a Esperanza Aguirre, ayer Máximo Pradera colocó un corte en RNE-1 en el que Fraga, en el 2006 ante la noticia de la muerte de Pinochet en Chile declaraba algo así:
¡Paz a los muertos! La época de Allende fue un desastre, alguien lo tenía que arreglar, lo hizo Pinochet, quien al retirarse dejó a Chile mucho mejor de cómo lo encontró. Todas las actuaciones militares de este estilo provocan algunas muertes es inevitable………...
No conozco a nadie que esté de acuerdo con estas manifestaciones. Me producen un montón de epítetos para el Sr. Fraga. A ti lector me imagino que también. Sólo voy a añadir una cosa:
Fraga coincide con Aznar, entre otras muchas cosas, en que ambos creen que el fin justifica los medios. Me explico los últimos comentarios de Aznar sobre la invasión de Irak apuntan que era necesario acabar con el dictador y asesino …..El precio destrucción de bienes y vidas humanas.

Para terminar diré que siento la muerte de Fraga, por la razón de que se ha evitado la vergüenza de tener que contestar a la posible llamada de la JUSTICIA ARGENTINA por su implicación en el franquismo