Uno de los personajes mas curiosos con los que te podías tropezar en FEMSA fue un proyectista de Utillaje Maquinaria, apodado El Rubio, y si no ahí va una muestra:
Una mañana de finales de octubre de 1975 apareció por su puesto de trabajo cabizbajo y meditabundo , lo que llamó la atención de sus colegas, pues esa actitud chocaba con su carácter jovial y dicharachero.
-¿Pasa algo, Rubio?, - le preguntó el compañero del tablero colindante
Contestó el Rubio- ¡Qué va a pasar!, lo tenías que saber, incluso tendrías que compartir mi estado de ánimo.
Ayer por la tarde al salir de trabajar - continuó el Rubio - me pasé por La Paz, como cada semana fui a visitarle, le encontré muy abatido, sin energía ni para hablar, hizo un esfuerzo y con un gesto de su rostro me indicó que me acercara. Pegué mi oído a sus labios y sobrecogido escuché en un susurro.- “Rubio, esto se acaba…”.
Como pude contuve mis lágrimas, y haciendo un esfuerzo para contener mis sollozos le dije: “no, esto no se acaba mi Generalísimo, Usted no nos puede dejar, España le necesita…”
Pero lo cierto es que si, esto se acaba… ¿te parece que no es suficiente motivo para estar como estoy?
Una mañana de finales de octubre de 1975 apareció por su puesto de trabajo cabizbajo y meditabundo , lo que llamó la atención de sus colegas, pues esa actitud chocaba con su carácter jovial y dicharachero.
-¿Pasa algo, Rubio?, - le preguntó el compañero del tablero colindante
Contestó el Rubio- ¡Qué va a pasar!, lo tenías que saber, incluso tendrías que compartir mi estado de ánimo.
Ayer por la tarde al salir de trabajar - continuó el Rubio - me pasé por La Paz, como cada semana fui a visitarle, le encontré muy abatido, sin energía ni para hablar, hizo un esfuerzo y con un gesto de su rostro me indicó que me acercara. Pegué mi oído a sus labios y sobrecogido escuché en un susurro.- “Rubio, esto se acaba…”.
Como pude contuve mis lágrimas, y haciendo un esfuerzo para contener mis sollozos le dije: “no, esto no se acaba mi Generalísimo, Usted no nos puede dejar, España le necesita…”
Pero lo cierto es que si, esto se acaba… ¿te parece que no es suficiente motivo para estar como estoy?
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