31 mar 2009

HACIENDA SOMOS TODOS, (algunos menos)

El pasado fin de semana ha dado comienzo la temporada automovilística de fórmula 1.

Sobre los resultados deportivos de la competición no siento interés alguno en realizar comentarios, sobradamente se ocupan todos los medios de comunicación de este menester.

Han despertado mi atención algunos datos que sobre los pilotos publicaba el pasado sábado el periódico EL PÚBLICO. En concreto la disparidad entre la nacionalidad de cada uno y su lugar de declarada residencia.
Solamente tres del total de veinte “residen” en el mismo país al que “representan”, es decir el 85% de los pilotos “residen” lejos de la nación cuyos colores “defienden”.

De los diez y siete “emigrantes”, ocho han escogido Suiza como país de acogida, entre ellos el asturiano Fernando Alonso. ¿Será por ventajas fiscales?

En competiciones deportivas yo no me siento representado por nadie, siempre he pensado que cada profesional del deporte compite para si mismo y si la interrogación anterior tuviera una respuesta positiva, confirmaría mi supuesto.

Moralmente no tengo nada que objetar, quizás muchos de los que se rasgan las vestiduras, si pudieran hacerlo, también le darían un portazo en las narices a Solbes, nuestro ministro de Hacienda. O tal vez no, ya que ¡Hacienda somos todos!

Pero, si se confirmara este truco para evadir impuestos, pediría humildemente a todo aficionado que juzgara al deportista sin tener en cuenta su lugar de nacimiento, tan sólo su valía profesional, y a Fernando Alonso que devolviera el galardón Príncipe de Asturias del 2005, pagado con los impuestos de los ciudadanos españoles.

Con el fin de abrir los ojos a muchos patrioteros, por último, sería bueno conocer si esta práctica “emigratoria” es seguida por el resto de la élite deportiva, y también por los divos del espectáculo, de las ciencias y de las artes etcétera…

No hay comentarios: